No todos los muertos son buenos. Algunos son muertos de mierda
Esta mañana, habiendo sabido de la muerte de un “fucilador” de Trelew y recibido una foto del “Guernica” de Pablo Picasso, considero obligatorio publicar este poema de Mario Benedetti escrito en 1963, “Obituario con hurras”.
Lo dedico al escuálido asesino del cárcel argentino “cuyo nombre recordar no quiero”, al “generalísimo” Francisco Franco y a un montón de “estrellados” de los cuales me gusta recordar explícitamente algunos de aquellos con los que he convivido en el tiempo y espacio: Pinochet, Videla, Stroessner, Garrastazú Medici, Banzer, Somoza …
OBITUARIO CON HURRAS
Vamos a festejarlo
vengan todos
los inocentes
los damnificadoslos que gritan de noche
los que sueñan de dia
los que sufren el cuerpo
los que alojan fantasmas
los que pisan descalzos
los que blasfeman y arden
los pobres congelados
los que quieren a alguien
los que nunca se olvidan
vamos a festejarlo
vengan todos
el crápula se ha muerto
se acabó el alma negra
el ládron
el cochino
se acabó para siempre
hurra
que vengan todos
vamos a festejarlo
a no decir
la muerte
siempre lo borra todo
todo lo purifica
cualquier día
la muerte
no borra nada
quedan
siempre las cicatrices
hurra
murió el cretino
vamos a festejarlo
a no llorar de vicio
que lloren sus iguales
y se traguen sus lágrimas
se acabó el monstruo prócer
se acabó para siempre
vamos a festejarlo
a no ponermos tibios
a no creer que éste
es un muerto cualquiera
vamos a festerjarlo
a no volvermos flojos
a no olvidar que éste
es un muerto de mierda